En 2017 realizamos un potente viaje de prospección a una de las regiones menos conocidas de la India y yo diría que de todo el planeta. Más de un mes dando saltos en jeep, cruzando ríos inmensos o caminando por los Himalaya, entre las comunidades Monpa, fueron unos días maravillosos que se han plasmado en esta nueva ruta para otoño 2020: LA INDIA REMOTA
La India es un universo inagotable de experiencias nuevas, de sorpresas y en algunos casos de revelaciones. Aquellos que disfrutan la primera vez, repiten. Esta ruta busca profundizar más en la realidad del subcontinente. El neófito en el país disfrutará de un viaje sin turismo masificado y en contacto con la naturaleza y las culturas olvidadas de los valles y las montañas del Noreste de la India.
Tras nuestra llegada a la capital de la India tomaremos un vuelo a las tierras del Noreste Indio donde se abre uno de los mayores ríos del mundo el Brahmaputra. Y en sus orillas el P.N. Kaziranga en las grandes llanuras inundables con bosques y grandes zonas de altas hierbas donde vive la mayor población mundial de rinoceronte asiático, elefantes, ciervos, monos, leopardos, tigres y miles de aves. Para comenzar con el viaje haremos varios safaris dentro del parque, tanto en elefante como en 4×4 para meternos de lleno en esta maravilla.
Seguimos ruta por el estado de Assam y cruzamos en un viejo ferry a la desconocida Isla de Majuli un lugar donde el tiempo se ha detenido entre los templos hinduistas o Satras morada de la cultura Vaisnavite. Las oraciones de los jóvenes monjes que surgen de los monasterios entre las palmeras, oración y arte donde se celebran bailes olvidados y los monjes tallan máscaras para los rituales. Paseos en bicicleta entre las cabañas de madera sobre los arrozales. Un lugar único.
En ferry cruzamos el Brahmaputra y avanzamos por carreteras polvorientas hasta el Parque Nacional de Nameri al pie de las enormes montañas de los Himalaya. Aquí descansaremos en un ecocamp y aprovecharemos para dar un paseo y disfrutar de la naturaleza salvaje.
Y después rumbo a las montañas del perdido reino de los Bonpa en los valles de Dirang,. Caminaremos por las aldeas de esta etnia de religión budista recorriendo senderos entre las montañas y los campos de cultivo y los lugares de oración budistas. Conoceremos también el Dzong de Dirang, Bomdila, arquitectura de piedra con fortalezas y vestidos tradicionales tibetanos entre estas gentes hospitalarias para disfrutar de la lejanía y la paz de otras culturas.
La ruta sigue ascendiendo hasta cruzar el Paso de Sela a 4.000 msnm para llegar hasta Tawang, un lugar resistente en la más pura tradición situado en el confín de las montañas del Himalaya y a una altitud de 3.000 msnm. Perderse por el Monasterio Budista de Tawang perteneciente a la secta Gelugpa, es una experiencia única, un lugar sagrado donde suenan las trompas budistas sopladas por monjes de túnicas azafrán al despertar el sol sobre las montañas. Caminaremos por sus valles y montañas descubriendo perdidas aldeas morada del pueblo Monpa y lugares de oración budistas antes de emprender el largo descenso a las tierras del Valle del Brahmaputra.
Allí nos alojaremos en un precioso bungalow de estilo inglés, el Wild Masheer, que fue la residencia colonial de los dueños de una enorme plantación de té a la que todavía se dedica el cultivo de sus tierras. Podremos pasear por la plantación, montar en bici por los caminos entre los pueblos y conocer a sus gentes, descansar con la sensación de tiempo detenido como en una vieja peli de aventuras. Y de regreso un par de noches en Delhi. La capital de India es como una cámara de descompresión, pues nos permite adaptarnos con rapidez a esta compleja realidad a través de una ciudad que tiene todas las posibles Indias en una sola ciudad.